A veces los que crees que sólo son alguien que acompaña a la mesa de al lado, son los que están dispuestos a quererte bien, a sonreirte en tus buenos momentos y a ayudarte cuando un pequeño obstáculo no te deja ver más allá.
Y mirar esas cuatro paredes, que encierran un año inolvidable, desde los chillidos del de mate, pasando por las risas en economía, Kant acechándose y nosotros pensando en la historia que teníamos que hacer esa tarde.
Gracias por ser vosotros. Por haberme hecho pasar esos ratos maravillosos.
Y mirar esas cuatro paredes, que encierran un año inolvidable, desde los chillidos del de mate, pasando por las risas en economía, Kant acechándose y nosotros pensando en la historia que teníamos que hacer esa tarde.
Gracias por ser vosotros. Por haberme hecho pasar esos ratos maravillosos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario