Que levante la mano quien saborea las cosas buenas de la vida. Quien se tira a la piscina nada más ver el agua, quien tiende la mano sin pensar en nada más, quien ve el día más pesado en el más positivo, quien corre como si fuera la vida en ello y quien se quiere tanto a sí mismo como a los demás.
Que levanten la mano aquellos que son capaces de cambiar el mundo, o que por lo menos aportan su granito de arena.
Que levanten la mano aquellos que son capaces de cambiar el mundo, o que por lo menos aportan su granito de arena.